La artralgia (artralgia) es dolor en las articulaciones sin otros signos de inflamación (hinchazón, enrojecimiento y movilidad reducida). Es un síntoma, no una enfermedad independiente.
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Para evitar confusiones, vale la pena decir que los términos "artralgia", "artritis" y "atropatía" no son sinónimos. La artritis es una inflamación de la articulación que, además del dolor, se acompaña de hinchazón, cambio de forma, enrojecimiento y movilidad reducida de la articulación.
La artropatía, por regla general, es una lesión articular secundaria en diversas enfermedades sistémicas, como hipotiroidismo, tirotoxicosis, diabetes mellitus, enfermedades hematológicas, etc.
Hay un gran número de causas del dolor articular, desde carencias de vitaminas y microelementos hasta graves enfermedades autoinmunes e infecciosas. Muy a menudo, el dolor en las articulaciones se debe a enfermedades reumatológicas:
Algo menos del 20% fueron causas no reumáticas: infecciones, tumores, enfermedades de la sangre, etc.
Los factores de riesgo para desarrollar artralgia incluyen:
El dolor en las articulaciones puede ocurrir o empeorar con las condiciones climáticas cambiantes. Varios autores asocian tales manifestaciones con la influencia de la presión atmosférica en los barorreceptores, pero el número de estudios sobre este problema es limitado. Como regla general, tales síntomas son causados por la presencia de una enfermedad articular particular y requieren una visita a un especialista para aclarar el diagnóstico.
La artralgia es dolor en las articulaciones. Es importante distinguir entre dolor de carga e inflamatorio:
A diferencia de la artritis, con la artralgia no hay inflamación de la articulación, decoloración de la piel ni aumento de la temperatura local por encima de la superficie de las articulaciones. En este caso, la artralgia puede ser el primer signo de artritis.
Dependiendo de la causa, el dolor articular puede ir acompañado de diferentes síntomas:
En primer lugar, se lleva a cabo el tratamiento de la enfermedad que causó la artralgia. La terapia dependerá del diagnóstico subyacente, la actividad de la enfermedad, la intensidad del dolor y la salud general.
La posibilidad y la necesidad de aplicar métodos de tratamiento quirúrgico dependerán de la enfermedad específica que causó el dolor en las articulaciones.
Si la artralgia es el primer signo de artritis inflamatoria, el riesgo de desarrollar deformidades irreversibles aumenta muchas veces, lo que puede conducir a una discapacidad permanente. Sin embargo, los métodos modernos de tratamiento en la mayoría de los casos pueden ralentizar la progresión de la enfermedad y mantener una alta calidad de vida humana, lo principal es contactar a un especialista de manera oportuna y seguir las recomendaciones de seguimiento y tratamiento.
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